No es algo que pase todos los días, pero a veces se quitan la careta.

Thomson Reuters Foundation News.

Gilles Moec es el economista jefe del Grupo Axa.

Extractos:

  • La transición a una economía descarbonizada es vital, pero sería una ilusión pensar que se puede conseguir sin costes. Una transición económica de esta escala requiere una financiación seria.
  • La Comisión Europea estima que la inversión necesaria es el 1,5% del PIB europeo, todos los años durante la próxima década.
  • En parte vendrá de inversiones privadas,, pero en muchos casos los proyectos verdes sólo serán rentables en un horizonte muy largo y necesitarán financiación pública.
  • ¿Pero cómo se puede garantizar esta fuente de financiación, teniendo en cuenta la sensibilidad política a la distribución de dinero público?
  • No necesitamos reinventar la rueda con un proceso burocrático nuevo y complicado – después de todo se trata de una emergencia. En 2012, la UE lanzó el Mecanismo de Estabilidad Europeo en respuesta a la crisis de deuda de la eurozona. Esta estrategia se podría usar como esquema para la respuesta financiera a una emergencia existencial aun mayor: la lucha contra el cambio climático.
  • Los aspectos esenciales del Mecanismo de Estabilidad Europeo deben replicarse en un nuevo Fondo Europeo de Emergencia Climática.
  • Pero con dos diferencias. Primero, tendría sentido que los fondos estuvieran disponibles también para las empresas, no sólo para los gobiernos. Y segundo, debería usarse la ventaja de la tasa de interés históricamente baja para pedir prestado dinero ahora. Para evitar desincentivar otras formas de inversión pública, además del Fondo de Emergencia Climática, tendría sentido excluir estos proyectos de transición de los cálculos de los déficit nacionales a la hora de establecer su grado de cumplimiento con las reglas del Pacto de Establidad y Crecimiento.
  • A menudo hay reticencias en algunos segmentos de la opinión pública europea a las iniciativas fiscales comunes, pero el creciente imperativo compartido de luchar contra el cambio climático podría ser la clave para dar un paso decisivo en la integración europea.

No podría quedar más claro. Si le quitas lo de la «emergencia» a este cuento, te quedas sin película. ¿Empiezas ahora a entender lo de Greta?

Lo del Parlamento Europeo escuchando a una adolescente aniñada, por no hablar de las reuniones internacionales para la gobernanza mundial, no es la payasada que parece. Es una acción directa, psicológica, sobre la «sensibilidad política a la distribución de dinero público» que menciona con preocupación el amigo Gilles Moec. De ahí «emergencia», y niña icono.

Fuente, Thomson Reuters Foundation News: